Conducir la furgo se convierte en algo ya habitual, pero me resulta de lo más divertido, allá en lo alto, con sus marchas al revés y su tracción trasera característico de las t3s. Subir los puertos de montaña se convierte en todo un reto, con su peso y sus 90CV, el paisaje relaja su ritmo :]
Situamos nuestro duplex en el mismo centro de Córdoba, a unos 10 minutos de la mezquita y cercano a un barrio con mucha vida. Paseamos por el barrio de la judería, hasta llegar a la mezquita por sus calles empedradas, nos vamos dando cuenta lo bonita que es Córdoba. Llegamos hasta el Alcázar de los Reyes y el puente romano sobre el Guadalquivir.
Un te moruno y la juderíaa nos espera al anochecer…
Cena en la furgo, y a la mañana siguiente, tras susto “me han robado la cartera” pero con resultado “todo ha sido producto de su imaginación”, bien pronto para la mezquita que de 8.30 a 10.00 es gratis, uno se ahorra pues 8 dignos leuros.
La mezquita es extraordinaria, grande, diáfana, hipnotizante. Los arcos y pilares nos rodean, es el mejor despertar que uno puede tener. Marieta se la goza.
En su mezcla de estilos…
Córdoba… nos quedamos con más ganas, la Sinagoga, el Alcázar de los Reyes, Medina Azahara, excusa perfecta para un reencuentro.
Partimos rumbo el chorro para pasar dos días en una de las escuelas patrias más fanáticas (http://tansoloesunmomento.blogspot.com/2010/03/dos-noches-y-un-dia-en-el-chorro.html).
Tras esto, dirección Málga donde intentaremos reparar el depósito de grises de la furgo, recoger la carta verde del seguro y hacer algunas compras para bajar al moro. Si! por fin cruzamos, desde Algeciras, pero esto ya corresponde a la siguiente crónica, muy pronto desde Marruecos.
Sed felices!
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